Durante los días 18 y 19 de febrero tuvimos la oportunidad de acudir a las XIX Jornadas de Nutrición Práctica, punto de encuentro para los profesionales de la salud, la alimentación y la nutrición.
El tema central de esa edición fue la Dieta Mediterránea, un concepto que nació en los años 50 de la mano del fisiólogo Ancel Keys gracias a su “Estudio de los siete países”, el cual puso de manifiesto el papel determinante de los hábitos alimentarios en la salud cardiovascular.
El estudio PREDIMED como impulsor de la Dieta Mediterránea
Los estudios alrededor del estilo de vida mediterráneo no han cesado, siendo el más importante el estudio PREDIMED, estudio que empezó el reclutamiento de participantes en 2003 y en el cual estuvieron implicados 11 grupos de investigación en toda España. El resultado ha sido publicado en 2013 y los resultados los presentó el Dr. Miguel Ángel Martínez.
En este estudio, el más importante hasta la fecha sobre los efectos de la dieta en la enfermedad coronaria, participaron 7.500 individuos, durante 5 años, divididos en tres grupos, dos de los cuales siguieron una dieta mediterránea, bien rica en aceite de oliva o frutos secos, y el tercer grupo, siguió una dieta simplemente baja en grasas.
Los resultados fueron muy satisfactorios: los 2 grupos que siguieron una dieta típicamente mediterránea redujeron un 30% su enfermedad cardiovascular, sobre todo la enfermedad cerebro-vascular (40%).
En ambos grupos bajó la tensión arterial, bajó el colesterol total, bajaron los niveles HOMA (resistencia a la insulina) y los niveles de PCR (proteína C-Reactiva, inflamación) se vieron mejorados.
A nivel cerebro-vascular, se vio que había menor incidencia de “depresión” en el Sur de Europa que en el Norte. En este sentido, la dieta influye porque hay un mayor aporte de macro y micronutrientes, gracias a la ingesta de pescado, rico en Omega 3, aceite de oliva, frutos secos, fruta y verdura. Si es bueno para el corazón, es bueno para el cerebro.
Estos hallazgos son muy importantes para el mundo de la nutrición y de la alimentación, teniendo en cuenta que el 31% de las muertes en el mundo se deben a la enfermedad cardiovascular, sobre todo por cardiopatía isquémica y eventos cerebro-vasculares.
Si lo traducimos a números, la cosa asusta un poco más: 17 millones de muertes al año en el mundo se producen por enfermedad coronaria. Se prevén 24 millones de muertes por este motivo en el año 2030.
Con estas cifras, es el momento de hablar de prevención. Estos son los valores que se usan para calcular el riesgo cardiovascular:
- – No fumar o haberlo dejado hace más de 1 año
- – Tener un IMC < 25
- – Ejercicio físico 2,5 h/ semana
- – Llevar una dieta saludable, rica en frutas y verduras, pescado y proteína baja en grasa.
- – Colesterol < 200
- – Tensión arterial 120 /80
- – Glucosa < 100
El estudio PREDIMED también nos recomienda…
- – Preferiblemente consumir alimentos poco procesados y cultivados localmente, para que conserven sus nutrientes intactos.
- – Fruta como postre habitual, vino en las comidas y menos carne roja.
- – Si vas a consumir pan mejor que sea integral, ya que se ha visto que el pan blanco aumenta la grasa abdominal y el perímetro abdominal
- – Reduce el consumo de patatas, pasta, arroz.
Como veis, la dieta de la Zona se asemeja mucho a la dieta mediterránea que recomienda el estudio PREDIMED, un estilo de alimentación equilibrada donde predomina el consumo de frutas y verduras, grasas saludables, principalmente el aceite de oliva virgen extra, y proteínas bajas en grasas, fundamentalmente pescados ricos en omega 3.
Foto en CC: Foodie’s Feed
Compartir:





soy una fiel seguidora de la dieta la zona, he comprado todos los libros , devoro cada uno de ellos en pocas horas, y disfruto creando menús y sabiendo que cuido de mi familia, mientras comemos equilibradamente y al mismo tiempo de manera deliciosa
¡Muchas gracias por compartirlo con nosotros, Vanessa!En breve devorarás un libro nuevo 😉