De forma natural, nuestro organismo genera radicales libres, unas formas muy reactivas de oxígeno capaces de provocar daños a nivel celular. Los polifenoles son capaces de captar estas moléculas, ayudando a la protección frente al estrés oxidativo.
El estrés oxidativo se produce por el desequilibrio bioquímico entre el exceso de radicales libres y la falta de mecanismos antioxidantes para combatirlos. Este daño se relaciona directamente con los procesos de envejecimiento y enfermedades cardiovasculares.
Diversas situaciones aumentan el estrés oxidativo, como por ejemplo el propio metabolismo, el ejercicio físico intenso, la luz, el tabaquismo o la contaminación.
Existen algunas sustancias que contribuyen a la protección de las células frente al daño oxidativo. Entre ellas se encuentran los polifenoles, en concreto los polifenoles del aceite de oliva, además de la Riboflavina (Vitamina B2), la Vitamina C, la Vitamina E, el Cobre, el Manganeso, el Selenio y el Zinc.
Los polifenoles forman parte de la composición de los denominados “berries”, que conforman un grupo de frutos de color rojo, violáceo, morado, que en ocasiones se utilizan como alimentos funcionales.
Estos frutos crecen en la región de Sudamérica. Entre ellos destaca el maqui (Aristotelia chilensis), que tiene en su composición cianidina y delfinidina, dos subtipos de antocianinas, y es además fuente de minerales como el hierro, que ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga.
Los hábitos de vida saludables también nos ayudan a reforzar nuestro sistema antioxidante:
Es un suplemento a base de extracto de Maqui, con vitaminas E y B5, indicado para contribuir a la función fisiológica antioxidante.
Es un suplemento de ácidos grasos Omega 3 obtenido a través de un exhaustivo proceso de destilación molecular múltiple.